domingo, 24 de febrero de 2013

Capítulo 4

Capítulo 4-  Si tú no crees en tí mismo nadie más lo hará
Eyquel y la chica estaban en la habitación, ambos estuvieron dos días durmiendo y cuando Eyquel despertó ella seguía durmiendo, pero despertó apenas Eyquel tomó el cristal con sus manos, los padres de Eyquel también estaban ahí, fue el padre de Eyquel el que tomó el cristal con una tela y lo guardo junto a Eyquel. Todos exigían respuestas, y era hora de recibirlas y así la chica comenzó a hablar.
-Mi nombre es Lezia, todo lo que les voy a contar es una larga historia, así que tengan paciencia.
Existen dos mundos, este al que ustedes perteneces y otro llamado La tierra, existe un destino para cada uno de los mundos, uno es el destino mágico donde la magia y la naturaleza controlan al hombre pero estos viven y el otro es el destino tecnológico donde los humanos destruyen la naturaleza, lo dominan todo pero al final causan su autodestrucción- contaba la joven, Eyquel y su familia aún están perplejos al ver que la joven esté despierta y siguen sin creer aquel momento donde vieron una gran demostración de fuerza y velocidad, su voz era como la dulzura de una cereza y sus ojos de rosado color le daban un toque especial, Eyquel estaba maravillado y prestaba mucha atención mientras la joven proseguía su historia -La tierra estaba destinada al destino mágico mientras que ustedes debían de sufrir el destino tecnológico, pero los humanos del otro mundo se rehusaron a la magia e iniciaron una guerra, al final de la guerra ellos desterraron la magia y se hicieron con el destino tecnológico, el cual los llevó a su propia destrucción y dejaron de existir, la magia tras miles de años llegó a este mundo, así que ustedes que estaban condenados a destruirse a ustedes mismo con el avance tecnológico ahora su destino pasa a ser el mágico, el árbol de la última vez era solo el comienzo, pronto muchos más despertarán, el cristal solo aceleraría el proceso pero tienen que entender que la magia pasará a dominar este mundo ahora- tras decir estas palabras todos estaban perplejos, sin importar que intentaran el bosque se levantaría eventualmente y sería el fin de todos, el simple pensamiento de que su existencia estaba condenada a la muerte desde el inicio de los tiempos era abrumadora, y saber que ahora vivirán pero seguirán condenados, y entonces la joven prosiguió -La naturaleza cobrará vida y tomará control del hombre, peor ahora pasaré a explicar el cristal. La noche que cayó fuego del cielo esos eran los cristales, cada cristal le da a una persona el poder de hacer magia y también le da el control sobre un familiar tras derrotarlo, cada cristal tiene un guardián a su lado- La joven mira a Eyquel fijamente -Tú tomaste el cristal sin enfrentarme, y ahora el cristal te es inútil y yo estoy atada contigo- dijo con furia, peor Eyquel no entendía exactamente lo que ella quería decir, y Lezia tras ver la cara de incomprensión de Eyquel decidió explicarle mejor y así continúo hablando -No todos los humanos pueden hacer magia, solo ciertas personas pueden hacer y si desean un cristal deben vencer al guardián de ese cristal, y solo aquellos que tengan la capacidad de usar magia serán capaces de ganar- en ese mismo momento Eyquel la interrumpe -Pero tú estabas dormida y no había forma de despertarte-, Lezia mira a un costado con timidez y vergüenza y entonces admite -Soy muy perezosa por lo tanto me dormí- inmediatamente, con una cara de no poder creérselo Eyquel le grita –Entonces es tu culpa que no puedas estar despierta- ambos comienzan a discutir –Soy un familiar defectuoso, no puedo efectuar magia y tampoco tengo habilidades especiales, y como si fuera poco no gano energía al dormir, por eso es que tú usando el cristal el cual es la unión entre el mago y el familiar me pasas tú energía y por eso es que puedo estar despierta-. Lezia tras decir tristemente estar palabras comienza a llorar, para ella era un gran dolor ser un familiar sin habilidades que no pudo proteger su cristal y ahora estaba atada a una persona normal incapaz de usar magia, pero entonces unos brazos la rodean y se sorprende, Eyquel la estaba abrazando  tenía los ojos llorosos y le susurró en el oído –Lezia, nunca vuelvas a decir algo así, no eres para nada defectuosa salvaste mi vida y la de todo el pueblo al derrotar al árbol ayer, eres más rápida y fuerte que cualquier persona que conozca, y ni mencionemos tu increíble belleza, así que no te atrevas a decirme nunca más que eres una persona defectuosa, si es por mi energía no te preocupes, me aseguraré de que siempre tengas parte de mi energía, quizás  no pueda usar magia como tú dices pero aun así no soy mala persona, y encontraré alguien capaz de usar magia a quien entregarle el cristal, ¿así serás feliz verdad?- Eyquel se paró y le extendió una mano para ayudarla a levantarse ya que ella se sentó en el piso a llorar.
Lezia comenzó a llorar como nunca, la inútil persona que ella odiaba la había hecho sentir feliz, Lezia sabía que una vez una persona consigue el cristal está atado al familiar por siempre pero ella decide omitirle ese detalle a Eyquel y le extiende la mano para que este la ayude a levantarse, porque ella vio en esos ojos de joven soñador una persona que quizás no era capaz de usar magia o de pelear como un gran guerrero, pero eran los ojos de una persona que lo daría todo por cumplir sus metas y promesas.

domingo, 17 de febrero de 2013

Capítulo 3



Capítulo 3-A veces solo nesecitamos amar algo para darnos cuenta de lo hermosa que es la vida.
El sol se ocultaba a lo lejos tras los interminables árboles que formaban el bosque, los habitantes del pueblo estaban junto al río presenciando algo que nunca creyeron que podría existir, un árbol que caminaba y hablaba y además odia a los humanos y principalmente a los leñadores, en ese mismo instante tenía en su mano a Eyquel un simple joven leñador, pero el árbol tenía otros motivos para estar lastimando a ese joven ya que ese simple joven había encontrado un artefacto que básicamente portaba magia y eso causó que el árbol despertara y ahora lo quiere para despertar al resto de los árboles y acabar con el pueblo que tanto tiempo los han hecho sufrir.
Eyquel cada vez estaba más cansado, perdía todas sus energías y estaba a punto de caer dormido, el árbol quería la gema y por eso Eyquel había logrado llevar su mano al bolsillo para intentar sacar la gema y tirarla al río pero no podía sacar su mano por estar apretado por las raíces que formaban la mano del árbol, eso causó que su mano estuviera en contacto con la piedra por mucho rato causando que su energía fuera succionada.
Ninguno de los aldeanos podía hacer nada para ayudar, ninguno tenía la fuerza o los medios para acabar con un árbol que puede devolver el golpe, la madre de Eyquel lloraba mientras veía como su hijo estaba al borde de la muerte, y su padre contenía su furia interior causada por la impotencia de no poder hacer nada, de repente mira hacia atrás para ver una mujer viniendo a enorme velocidad, gran cabello rojo y un vestido que reconocía, era la mujer que dormía en la casa, la habían encontrado con sus ropas rotas así que la madre de Eyquel la cambió y le puso un simple vestido de color azul y blanco y bastante cómodo por eso se lo puso para que durmiera y gracias a eso ella podía correr con facilidad, pero tenía una velocidad nunca antes vista –Esa es mi hacha- exclamó el padre de Eyquel al ver que ella venía con su hacha de leñador que estaba en su casa, con su velocidad llegó sin problema al pie del árbol, preparó el hacha y le dio un gran golpe que hizo que pedazos de madera salieran volando, nunca antes nadie había visto un golpe tan fuerte, era como la fuerza de dos grandes hombres en una pequeña mujer de un metro sesenta.
Para los árboles un simple golpe era un eterno dolor y este golpe valía por dos por la extrema fuerza de la mujer, el árbol grita de dolor y suelta a Eyquel pero la joven suelta el hacha y lo agarra antes de que tocara suelo y rápidamente se aleja del árbol antes de que este contraataque, deja a Eyquel un poco más lejos de la multitud fuera del alcance del árbol y le dice –No sueltes esa piedra por nada del mundo, espera aquí-, Eyquel estaba muy cansado y hasta se puso pálido, la piedra le succionaba toda energía y vida dentro de él, lo que más quería era tirarla lejos pero esa mujer había despertado y sabía de la piedra, además de que lo había salvado así que lo menos que podía hacer era obedecerla al menos por un rato, y con el esfuerzo de mantener los ojos abiertos y no desmayarse Eyquel vio como ella comenzó a correr hacia el árbol a una gran velocidad.
Ella tomó el hacha que estaba en el suelo y volvió a golpear al árbol con todas sus fuerzas, el árbol no podía razonar por el dolor así que comenzó a tirar golpes y patadas al azar pero ella era muy rápida y podía esquivar todos eso golpes con facilidad, entonces uno de los puñetazos del árbol se entierra en el suelo y ella comienza a trepar su brazo, el árbol la ve y reacciona con mucha furia pero antes de poder siquiera reaccionar ella lanza el hacha la cual acierta el ojo de la criatura, entre sus gritos el árbol arranca su brazo del suelo pero la pelirroja logra aterrizar sin problemas y ve como el árbol se retuerce de dolor y cae al río, y entonces cesó todo movimiento, cuando todo se tranquilizó ella soltó un gran suspiro, y mira hacia donde había dejado a Eyquel y le grita –Ya puedes soltar la piedra- y Eyquel quién estaba muy sorprendido por todo lo sucedido, casi paralizado del shock, lentamente deja la piedra caer de su mano y sus últimas fuerzas desaparecen cayendo en un profundo sueño, inmediatamente lo mismo le pasa a la joven que había derrotado a la horrible criatura y salvado el pueblo.

¿Sabías que en el mundo en el que se basa esta historia no existe pizca de magia? por si no había quedado claro, es un mundo prácticamente idéntico a lo que conocemos como la época medieval

viernes, 15 de febrero de 2013

Capítulo 2



Capítulo 2- Los sueños rara vez nos encuentran antes que nosotros a ellos
-Es que aprendí a distinguir entre la realidad y la fantasía- gritó Sora, Eyquel decidió caminar en dirección opuesta lo más lejos posible de Sora mientras dice –Qué puedas distinguirlas no significa que tengas qué cerrarte a una, no eres sabia o más madura por eso, aquel qué cierra su mente nunca podrá ver lo qué hay más allá- Sora se quedó dónde estaba mirando como Eyquel se alejaba –Eres tan infantil Eyquel Grunemond- se dijo a sí misma Sora antes de volver a su casa por la dirección en la que vino.

En el puente sobre el río cercano al pueblo Eyquel miraba su reflejo en el agua, para él eso era mágico ya que el agua reflejaba la realidad tal y como era, pero bajo ella había todo un mundo tanto de hermosas piedras como de diversos peces que nadie puede ver a no ser que se tomen el tiempo de mirar, Eyquel creía que la magia estaba camuflada en la realidad y solo aquellos que se esforzaban podrían llegar a verla, criaturas inimaginables, extraños poderes, lugares hermosos. Una leyenda antigua habla de la isla de la fantasía un lugar separado del mundo donde todas esas cosas existen, y es el sueño de Eyquel encontrar esa isla.
Junto al río estaba un gran bosque, Eyquel lo conoce bien ya que él y su padre son leñadores, Eyquel al estar tan concentrado en el agua no notó a uno de los árboles moviéndose pero no un movimiento como si de un viento fuerte se tratara, el árbol había arrancado sus raíces del suelo y había comenzado a caminar en dirección a Eyquel, La realidad qué reflejaba el agua comenzaba a distorsionarse debido a los poderosos pasos que daba la criatura árbol y entonces Eyquel despierta de su trance y logra ver un árbol gigantesco capaz de caminar, prácticamente se había transformado ya que tenía dos piernas al igual que dos brazos y la parte de más arriba era su cara la cual tenía dos ojos  una boca, y sobre su cabeza se encontraban el resto de las ramas y hojas qué componían al árbol. El árbol se movía más rápido de lo que Eyquel creía y antes de poder reaccionar ya había cruzado el río, para Eyquel un árbol andante era la realización de sus sueños la magia existe pero por culpa de estar perplejo ante la criatura esta blande su brazo de una forma muy rápida y con su mano atrapa a Eyquel y lo acerca a su cara para tener una conversación con él –Maldito leñador, llevas años asesinándonos y ahora que me has despertado podré obtener mi venganza- decía el árbol, Eyquel estaba atónito al ver un árbol hablar, estaba bastante alto ya que el árbol tenía unos diez metros, el árbol apretó con fuerza su mano y el pobre Eyquel gritó del dolor, no entendía lo que decía el árbol, él no recordaba haber despertado al árbol, -¿tendrá que ver con la chica o el cristal?- pensaba Eyquel pero sus pensamientos se vieron interrumpidos por los gritos del árbol –Dame el cristal para que pueda despertar a los míos o lo quitaré de tu cadáver- mientras apretaba con fuerza a Eyquel, -Bastante violento para ser un árbol- Logra decir Eyquel a pesar del dolor –Los tuyos llevan matándonos años, cada uno de nosotros tiene vida, familia y amigos, y no podemos hacer nada más que mirar cuando vienen los tuyos y comienzan a matar a los nuestros de una forma lenta y dolorosa, lo miramos gritar con cada hachazo, cada vez que ustedes cortan un árbol el bosque llora, y ahora gracias a la piedra que cayó del cielo podemos despertar y obtener nuestra venganza- gritaba con mucha furia,y cada vez apretaba más a Eyquel, los gritos de ambos atrajeron a los que vivían cerca incluyendo los padres de Eyquel para presenciar la mágica criatura sujetando la débil vida del pobre muchacho
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¿Sabías qué Grunemond viene de grünen Mond qué significa luna verde en alemán?

jueves, 14 de febrero de 2013

Capítulo 1



Capítulo 1-Este mundo no es nada si perdemos la capacidad de soñar
Joven de muy pálida piel y cabellos del color del fuego que le llegaban al cuello y un cuerpo normal, ella aparentaba tener entre 16 y 18 años y estaba dormida profundamente.
La gris habitación era pequeña y húmeda igual que el resto de la casa donde vivía una pequeña y pobre familia de leñadores, esta era la habitación del chico que estaba sentado junto a la cama admirando a la mujer como si fuera el más raro de los tesoros.
El joven tenía un desarreglado cabello negro y unos ojos verdes claros que era lo único que resaltaba en él, tenía un cuerpo un poco atlético y medía al menos un metro ochenta, como quien nota que la fantasía está muy lejos de la realidad se para y abandona la habitación que para él era como abandonar un mundo hermoso en el cual deseaba estar cada segundo de su vida. En la sala se encontraban los padres del joven, El padre era musculoso y medía fácil unos dos metros un espeso bigote sobre sus labios era lo que más llamaba la atención junto a su calva cabeza, mientras que su madre era una hermosa mujer de esbelta figura y largo cabello del color del más dulce café y unos ojos verdes claros que llamaban la atención más que nada.
-Lleva dos días durmiendo padre, esto no puede ser natural- Exclama el joven ante su padre y luego prosigue hablando –La encontramos la mañana siguiente a la noche que cayó fuego azul del cielo, y estoy seguro que uno cayó en el bosque, pero cuando fuimos por la mañana a talar no había nada, ni siquiera rasgos de un incendio, pero la encontramos a ella dormida y no importa qué intentemos no despierta- El padre lo mira seriamente un poco y luego cruza los brazos y cierra los ojos pensando y tras un minuto de silencio mira a su hijo y responde –Sé que tienes esa idiota creencia a la magia, llevas desde que la encontramos diciendo que está poseída o es alguna especie de criatura mágica con forma humana, tienes 18 años y eres un adulto- su voz empieza a sonar más fuerte –Deja de inventar estúpidas historias de niños, la magia no existe, abandona tu idea de fantasía eso solo te conducirá a ser el idiota del pueblo y que todos se burlen de ti, encontramos a una indefensa chica inconsciente en el bosque y la trajimos para ayudarla, nadie del pueblo la reconoció pero me rehúso a negarle la ayuda aunque aún no he encontrado forma de despertarla quizás si dejaras de acosarla mientras duerme y soñar con teorías mágicas e intentaras ayudarla de verdad quizás ya habría despertado- El padre se levanta de su silla que parece minúscula bajo un hombre tan grande y prosigue –Deja de ser un niño y crece de una vez Eyquel- Dicho esto Eyquel empieza a correr y abandona la casa, tras eso su madre pronuncia unas suaves palabras –Este mundo no es nada si perdemos la capacidad de soñar-, su marido la escucha pero finge no hacerlo y vuelve a su asiento a esperar qué la comida esté lista.
En la parte trasera de la casa junto a un viejo árbol estaba Eyquel con lágrimas en los ojos pronunciando para sí mismo –La magia existe, estoy seguro que existen míticas criaturas y poderosas personas y cosas inimaginables en ese lugar- Eyquel mete su mano en un agujero del árbol y extrae un trapo qué envuelve un misterioso objeto, al desenvolverlo se ve una extraña piedra verde –Te encontré en el bosque cerca de la chica, no te mostré ante mi padre porque él se desharía  de ti, puedo sentir la magia en esta piedra, lo qué sujeto en mi mano es la prueba de la existencia de mis creencias- Pensaba para sí mismo Eyquel entonces escucha un ruido detrás de él y envuelve la piedra y la esconde rápidamente en su bolsillo.
Una mujer de la misma edad de Eyquel aparece, ella tiene corto cabello del color del sol y brilla con la misma intensidad, su gran sonrisa era hermosa en su cara cubierta de tiernas pecas, Sora la vecina de Eyquel y amiga de la infancia – ¿Aún crees en la isla de la fantasía? Sabes qué son cuentos para niños- dijo, Eyquel no se signó a mirarla a los ojos –Cuando éramos niños tu creías conmigo, pero abandonaste ese sueño, el de qué juntos encontraríamos la isla donde todo lo inexistente existe- dijo con tristeza en su voz Eyquel.

Sección del sabías qué:
¿Sabías qué Eyquel es un nombre de origen germano y significa "El que defiende con la espada"?

miércoles, 13 de febrero de 2013

La puerta a la fantasía está dentro de todos nosotros



¿Cuándo fue qué los sueños empezaron a desaparecer?,¿cuándo la fantasía desapareció?,¿ y la gente solo podía ver lo que tenían en frente sin poder mirar a otro lado?,¿ cuando los niños dejaron de creer en aventuras y sus héroes, para concentrarse en sacarse fotos para subirlas a internet?, que alguien me diga cuando fue que la imaginación comenzó a ser algo estúpido e infantil, dejen qué me corrija, cuando fue que la gente comenzó a creer que imaginar, que creer en la fantasía y en héroes y aventuras pasó a ser estúpido e infantil, no sé si me explico.
Tengo 18 años de edad, soy estudiante, mi tiempo libre lo divido entre libros, videojuegos y amigos, disfruto de muchas historias sin importar el método en el que sean contadas, sean por palabras, letras o imágenes para mí una buena historia es una buena historia, sea un romance, fantasía o un drama, sea en un mundo alegre y divertido o en uno oscuro y deprimente, pero siempre disfruto una buena historia.
Mi sueño, mi motivo en la vida desde qué tengo memoria, es crear una historia. Una aventura épica en un enorme mundo peor nunca consideré ninguna de mis ideas lo suficiente buenas como para dignarme siquiera a guardarlas como recuerdo, quería un mundo distinto y original pero cada vez se me hacía más difícil.
La vida es difícil todos saben eso pero siento qué las personas han olvidado como desenchufarse un poco de ella, es irónico porque hay mucha gente que por más qué odien la realidad, la abrazan como un tesoro y están bien en hacerlo pero solo digo, en mi humilde opinión, qué hay que saber desconectarse un poco, hay dos clases de momentos en la vida, en los que debemos estar serios y en los que podemos elegir si estar serios o alegres, no sé ustedes pero yo cada vez que tengo la posibilidad de elección elijo estar alegre.
Hoy quiero dedicar este espacio a mi desconexión, a iniciar un mundo de fantasía, sea bueno o no, porque yo nunca consideraré nada creado por mi bueno, así qué dejo este papel virtual como testimonio de mi creación.
Me gustaría compartir esto con tanta gente pueda, sea mi obra buena o una mierda, me gustaría volver a avivar la llama del amor por la fantasía aunque sea una chispa, sé que aún existe y me gustaría intentar contribuir con mi grano de arena, gracias por leer, y espero que sigan por aquí una vez la historia comience.